"...y depronto se dio cuenta de que
la única manera en que estarían juntos
sería sólo en sueños..."
El amor es un juego y yo lo juego
entre la espada de la lujuria se quema mi carne
unos labios se acercan
y como el péndulo de la nostalgia
escapan de mi pensmiento.
En otras tierras y en otros cuerpos nos encontraremos
tu perfecta y sonriente sabiendo que el destino juega de tu lado
y yo ciego de recuerdos y tiempos apuntando lo que pasa
en hojas que nunca escaparan de mis manos y no sabran el sabor del aire.
Somos lo que somos desde que nos conocemos y te veo tan lejana
que grito tu nombre al espacio de la noche
para que ella misma al cerrar tú los ojos
te acaricie y recorra tu cuerpo como
yo lo he hecho en tantos sueños.
HECTOR FRAGOSO