
Pasaron los años y en la preparatoria tuve un maestro, Francisco Cañón, me dio la materia de Ética y Filosofía. Su clase me gustaba demasiado, pero no se me quedaba nada de lo que decía. Llegué a pensar que los filósofos eran aburridos y tontos. ¡Y yo que pensé que estudiar filosofía era la mejor manera de enteder la vida y compartir el conocimiento! Que equivocado estaba.
En la Universidad un excelente maestro, Marco Antonio Millán, me explicó la filosofía de otra manera y fue como una segunda oportunidad entre ella y yo.
En las vacaciones de Navidad me regalaron varios libros de Rius entre ellos éste: Filosofía para principiantes. Me gustó. Aunque es una versión bastante resumida de las ideas de filósofos importantes el lector puede hacerse de un panorama general de la historia de la filosofía y lo mejor de todos es que quedan las ganas de buscar las obras de los filósofos aquí expuestas.
De la misma manera en que sucede con los periódos literarios en que se contradicen unos a otros , las ideas filosóficas pasan por el mismo proceso. Un filosofo le revisa y corrige la plana de su antecesor y así sucesivamente hasta el fin de los tiempos o hasta que el 2012 lo permita.
Recomiendo el libro como un pequeño paso para el basto mundo de las ideas y los conceptos, ahora que si usted es un lector consumado y reflexivo que necesita de cosas más profundas, analíticas y abstractas, pues le recomiendo que se ve en el espejo.