DF (13-Febrero-2014) Hector Fragoso.-Antonio Mohamed sabe que
los números del América no son lo que la afición y la prensa esperaban del
equipo más poderoso mediaticamente hablando. Su semblante siempre se muestra relajado
y nunca falta la sonrisa que lo caracteriza.
El América ha perdido
dos encuentros en lo que va del presente torneo y eso lo sitúa en la posición
número tres de la tabla general. Es verdad que el América no tiene las grandes
goleadas que se desearía pero el rival también juega, el arbitraje y sus
errores en contra y/o a favor del equipo también cuentan y está por de más
decir que las caza de los árbitros hacia Rubens Sambueza también es una
constante.
El planteamiento
táctico es el adecuado. El problema que he detectado por el momento es la
defensa. Me explico. Si viste el partido contra Pachuca, Hirving Lozano se
“come” a el “Maza” Rodríguez en una jugada que no se antojaba para mucho; y
menos si tomamos en cuenta que el Maza tiene pasado europeo y mundialista. La
manera en como Rodríguez le da el centro y no la lateral demuestra que su falta
de técnica y su distracción en los últimos minutos de juego. Contra eso ningún
entrenador tiene la respuesta y el castigo más adecuado sería la banca.
Expongo otro ejemplo
En el partido contra
Atlas, el ataque más fuerte de equipo fue por los costados. Layún y Aguilar,
encargados de defender ese sector no pudieron regresar a realizar la marca de
manera correcta. El trabajo que se les exige es demasiado y más sin tomamos en
cuenta que es época mundialista por la que los posibles seleccionados buscan
cuidarse más.
A eso agréguele que no
hubo pretemporada, que Andrés Ríos todavía no llega a su nivel y que Mohamed no
es el Piojo Herrera ni Raúl Jiménez es Chucho Benítez.
Estamos frente a un
América nuevo, con la mirada puesta en el campeonato y que busca en esta etapa
desplegar un futbol más táctico que vistoso. No comparemos, apreciemos la
diferencia.
